Chicas, qué no cunda el pánico, George Clooney está en Valencia. No diré el hotel en que está alojado para que a su director no le dé un patatús cuando llegue la avalancha de fans, pero vamos, las opciones se pueden contar con los dedos de la mano: Las Arenas o el Westin. Pista: los americanos suelen viajan con Starwood y una de sus marcas es Westin.
¿Quien le hará de cicerone en la ciudad? ¿Cuchita Lluch, la flamante presidenta de la Academia Valenciana de Gastronomía? ¿El Conseller Máximo Buch?
Lo más probable es que sea una empresa especializada en servicios para vips. Ana Merelo tiene una de esas agencias que organiza planes para famosos y megaricos. Cuando Kevin Costner estuvo en Valencia le preparó un plan a medida: visita a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un paseo por el centro histórico, y otro por la playa de la Malvarrosa. Kevin Costner pidió ver un cuadro del Museo de Bellas Artes y Lou Reed, ver las belugas del Oceanografic.
“Esta gente es tan popular que ellos mismos buscan planes más íntimos y exclusivos y les preparamos un programa a medida. Si les gusta el vino, una visita a una bodega; si son aficionados a la vela, un recorrido por la costa en velero con un patrón que sepa inglés; si tiene intereses culturales, les enseñamos la Valencia histórica”. El problema con George Clooney es que es difícil salir a pasear tranquilamente por el barrio del Carmen, ¡la que se podía montar!
El plan que más les gusta a los vips que visitan Valencia es una visita al Mercado Central con algún cocinero famoso, como Bernd Knöller. Allí les enseñan los mejores productos de la zona y luego les dan una clase de cocina y el plan acaba con una buena comilona en el restaurante.
Gracias a la Copa América y megaeventos como la Fórmula 1, las empresas turistícas aprendieron a dar servicios premium para este tipo de clientes vip: jugar con golfistas famosos, clases de cocina con estrellas michelín, pilotar un fórmula 1 en el Circuito Ricardo Tormo y planes de ese estilo. Sin embargo, estas mismas empresas se quejan de que a partir de 2007 empezamos a echar por la borda todo lo que habíamos conseguido. El turista que llega en un avión privado con un cargamento de maletas Vuitton no busca lo mismo que el que llega en Ryanair con una mochila y parece que aquí les hacemos más caso a los segundos que a los primeros. Y eso que los mochileros dejan mucho menos dinero que los vuittoneros. Por ejemplo, ahora mismo en la Marina Real del Puerto ha atracado un megayate de 110 metros de eslora. “Sólo en gasoleo consume 170.000 euros cada vez que hay que llenar el depósito”, cuenta Cristina Albamonte. El barquito en cuestión pertenece al jeque Al-Futtain de los Emiratos Arabes, y tiene 44 personas de servicio, piscinas, gimnasio, helipuerto y hasta cine propio.
El caso es que las empresas que ofrecen estos servicios se han puesto manos a la obra y han montado la asociación “Valencia Premium” para ver cómo pueden atraer a ese turista de lujo para el que no existe la palabra crisis. La asociación se presentó el jueves pasado en el Hotel Westin y allí estuvo lo más top del turismo local: el cocinero Ricard Camarena, el director del Westin Valencia,Frank de Weerdt; el del Hotel las Arenas, Carlos Boga, el del Hotel Palau de la Mar, Ignacio Zoco; Ana Merelo, de Valencia Guías; Pam Op den Brouw, de 3n1 Ivents; Pablo Landecho, director de la Marina Real, y Alejandro del Toro, Director del Bioparc; Javier Andrés, de La Sucursal y Vertical, Fernando Aliño, del Grupo Alto, Ricard Camarena y Alejandro García, de Bodega Casa Montaña. A todos ellos los conoce bien Cuchita Lluch, que acaba de ser reelegida presidenta de la Academia Valenciana de Gastronomía. Junto a ella están Sergio Adelantado, Lourdes Reyna, Rafael Alcón, Francisco Martinez Boluda, Ana Portacelli, Carlos Pascual, Enrique Amat (calzados Magrit) y José Sanchís, de Rebeca Sanver.
Javier Andrés, de La Sucursal y Vertical, Fernando Aliño, del Grupo Alto y Ricard Camarena en la presentación de Valencia Premium en el Hotel Westin.