lunes, 26 de marzo de 2018

La vida empieza a los cincuenta

La mejor época de la vida para ser feliz empieza a los cincuenta, al menos eso defienden algunos expertos en envejecimiento. Los hijos ya están criados y se supone que no dependen de ti. El esfuerzo de años en el trabajo empieza a dar sus frutos y la vida se ve con una perspectiva más amable, con menos autoexigencia y libre de complicaciones. Además, a esas alturas, la mayoría ha alcanzado una estabilidad económica, social y afectiva. Vamos, que ya tienes una vida hecha y ahora se trata de disfrutarla. Esa etapa suele ser larga porque dura hasta que la salud lo consiente.
Eso se nota en los saraos. La generación de más edad suele ser la que más disfruta. Están mucho más relajados. Ellas con la seguridad que da los años y esa capacidad de seducción de quien no tiene que demostrar nada; ellos con el saber estar, el sentido del humor, la condescendencia con los errores ajenos y la empatía con los demás.
El jueves la Galería Shiras inauguraba exposición. Pocos jóvenes y muchas señoras y señores estupendos disfrutando del arte y de una copa de cava o de vino: Pepa Rodriguez, Marisa Martinez-Medina, Laura Gomar, Alejandro Bethancourd, Miquel Navarro, Ximo Amigó, Marisol Martinez, Enrique Lucas, Laura Gallego y Angel Villanueva, Paz Pajarrón, Helena Calvillo, Teresa Nuez, Carlos Salazar, Marisol Salanova, Jose Luis Cueto, Jose Luis Clemente, Ana Ibañez, los artistas Horacio Silva, Jose Saborit, Sebastián Nicolau y Lu Gorritz, Antonio Such, el coleccionista Jose Pedro Martinez Guerricabeitia,  Ricardo Forriols.
El interior de la galería se quedó pequeño y la gente salió a la calle con una copa de vino en la mano. Si no fuera porque eran adultos, alguien podría pensar que se trataba de uno de esos botellones que montan los adolescentes en la calle, sin bolsas de plástico ni gritos, claro.
Qué delicia poder hablar de arte con el artista Vicente Colom, que te explica sabiamente la diferencia entre la arquitectura andalusí de la Mezquita de Córdoba y la Alhambra de Granada. O con la estilosa Paloma de Miguel, que ha hecho un carrerón durante treinta años en una multinacional farmacéutica y ahora disfruta de unos años sabáticos en Valencia viendo exposiciones y asistiendo a talleres de pintura. O con Rafael Alcón, el presidente de la Fundación Bancaja, siempre trayendo a Valencia colecciones únicas. Por cierto, que la Fundación está preparando varias citas potentes para abril: Espais d’art, que reunirá a artistas vinculados a la Comunidad Valenciana y nacidos entre las décadas de 60, 70 y 80; una exposición de Ignacio Zuloaga, la primera muestra monográfica del pintor vasco que se realiza en Valencia con colecciones públicas y privadas. Y finalmente una muestra de Sorolla con una selección de obra de temática sacra y religiosa. ¡A ver si trae la exposición de Sorolla y la moda!
La exposición de la galería Shiras reúne obra de dos mujeres con una trayectoria madura: Cuqui Guillén perteneció al Equipo Límite y pinta un pop art muy sofisticado, con mujeres en hoteles que son como escenas de películas, y Mavi Escamilla, con una pintura más conceptual, lleva trabajando desde la década de los ochenta. Juntas han pintado una serie de cuadros: Cuqui dibuja el lienzo y Mavi mancha oportunamente el dibujo.
Si en la galería Sara Joudí consiguió reunir a un buen número de mujeres estupendas, Encarna Roig no se quedó atrás en la boutique de accesorios que dirige. Presentaba las nuevas colecciones y se trajo a un artesano que explicó todo el proceso de creación manual de un bolso de piel española. No se perdió detalle la doctora Luz Aguiló, Amparo Ortuño, María Dolores Pérez Lis, María Dolores Enguix, Paz Pajarón, Laura Gallego, María Jose Ordech, Pilu Diez de Ribera, Mª Angeles Miguel, Amelia Delhom, Alina Giorgeta, Amparo Calvo, Virginia Gómez-Ferrer, To Campos y también algún que otro caballero como Josep Lozano, el fotógrafo José Luis Abad, Agustín Buraglia, el estilista Rafa Moreno, el artista Jarr y el bloguero Jaime Navarro. Para amenizar la tarde, Encarna agasajó con dulces y uno de los mejores cavas valencianos: tantum ergo rosse.
La valenciana Cuchita Lluch también encontró su plenitud a los cincuenta. Conoció al actor Juan Echanove, se fue a Madrid y en apenas unos años se ha convertido en pieza imprescindible en la vida social madrileña. Ahora acompaña a Echanove en todas sus giras, se ha matriculado en la universidad en Humanidades, sigue apoyando la gastronomía valenciana allá donde va y no se pierde un sarao glamouroso. Esta semana, sin ir más lejos, estuvo en una cena de gala hiper-mega-lujosa en el Palacio de Fernán Núñez organizada por el periodista Carlos García Calvo. Allí compartió mesa con otras valencianas, Amparo López Verdeguer y la modelo Cristina Duato, y con el diseñador Hannibal Laguna. También estuvo Jaime de Marichalar, la arquitecta Teresa Sapey y un montón de celebridades de la moda y la sociedad como el diseñador Lorenzo Caprile, Cósima Ramírez, hija de Aghata Ruiz de la Prada, la hija de Carlos Falcó, Sandra, o Ignacio Osborne. La cena la preparó el televisivo chef Pepe Rodríguez, de Master Chef, y en la cena se tomaron grandes reservas de champagne.
La vida empieza a los cincuenta, no es de extrañar que se celebre esa fecha de cumpleaños por todo lo alto. Así lo hizo estos días el empresario Eugenio Lisart, que reunió en el restaurante Tofolet a sus amigos con una paella y buen vino. Euge estuvo acompañado por toda su familia. Sus padres Emilio Lisart y Amparo Reyes, vicentinos de pro, fundadores del Altar de la Cañada y pertenecientes durante años a la Junta Central Vicentina, su mujer, Mónica Bueso, sus hermanos Emilio, Santiago, Alvaro y Cristóbal, sus cuñados Ramón Garcerá y Elvira y Carlos Bueso y amigos como Pablo Torres, Fernando Monforte, Gabi Pellicer, Isidro Badía, Nacho Bas, Titín Martínez, Antonio Lon y Sonia Colvee, Vicente Boscá, Gerardo Yague y su mujer Montse, Vicente Ferrer y Elena y Emilia Reigosa.

lunes, 19 de marzo de 2018

Entre masclet y masclet

La mascletá es mucho más que un montón de petardos explosionando en el suelo y en el aire. Eso es lo que suelen apreciar los que viene de fuera, un estruendo prolongado. Los entendidos, esos que a las diez de la mañana ya están cogiendo sitio en primera fila, miden su ritmo, sus tiempos y sus colores. Y para la mayoría de los de aquí es un motivo de fiesta, que puede llegar a emocionarte cuando se acerca al final con los cohetes haciendo vibrar los cristales. Entonces se nos eriza la piel y la valencianía rezuma por todos nuestros poros.
Pero es también una buena excusa para hacer sociedad, ya lo era cuando de jovencitas, íbamos a ver si la fortuna nos ayuda a toparnos con el chico que nos gustaba, te hacías la encontradiza y te ponías a su lado a ver si con suerte, el muy soso, se daba cuenta y te decía algo, (¡Uff, cómo han cambiado los tiempos!). Ahora, que ya no estamos para esos menesteres, lo suyo es encontrar a quien te invite a un balcón. De unos años a esta parte han ido cogiendo fuerza los piscolabis en las terrazas y balcones de la Plaza. Allí, entre jamones, quesos y cervezas esperas a que lleguen las dos, mientras te relacionas con lo más granado de la sociedad valenciana y algún que otro personaje famoso que viene de afuera. Son como el palco de un campo de fútbol.
Los hay de todo tipo. Los que ponen los bancos y empresas pijas para agasajar a sus clientes y que sirven para hacer negocio entre masclet y masclet. Hay otros más políticos, como el que montan los medios de comunicación. Y otros que reúnen a la creme de la creme de la sociedad valenciana, como el del Ateneo. Allí puedes ver a Isabel Bonig charlando con Fernando Giner, cerca al peletero Amado y un poco más allá a Vicente Boluda con un grupo de empresarios de Bilbao, junto al presidente de la Cámara José Vicente Morata. Y sin perder detalle, la presidenta del Ateneo Carmen de Rosa, pendiente de cada invitado.
Entre las habituales del Ateneo también está la bloguera Judith Fenollar, su madre María Rosa Fenollar, las hermanas Blanca y Laura Fitera, Mercedes Fillol, Amparo Lacomba, Pilar Millán, Toña Jativa, Mayte Monteagut, Carmen Pocoví, Mayrén Beneyto… Mayrén también estuvo en el balcón de la familia Segura, con su nuera Eva Marcellán, Vicente Gracia y la diseñadora Marta de Diego. Como anfitrionas, Emilia Hervás y sus hijas Laura, que fue fallera mayor de Valencia en 1994, y Esther Segura.
Hay que reconocer que ir a la mascletá es uno de los mejores planes falleros. Te pones algo escotadito, que como salga algo de sol vas cogiendo color, un buen rojo de labios y a quedar con las amigas para tomar el aperitivo. Luego una paellita y a disfrutar del ambiente fallero hasta que os canséis. Es lo que hicieron Esther Barrera y su amiga Leonor Rodríguez o Amelia Delhom con su hija Miriam y sus amigas Vicenta Ramón, Lourdes Martínez del Amo y Gloria Ramón.
La Regina del Jocs Florals, Mónica Duart, también se acercó a uno de los balcones con su corte del amor: Andrea Villafañé, Nuria Galbis, Marian Pérez y Sonia Piles. Fue en el que montan Pepe Rubert y su mujer Zdenka Lara.
Los hermanos Jordán aprovecharon estos días para hacer networking en la mascletá y organizaron dos encuentros empresariales: uno en la terraza del hotel Casual y otra en las oficinas del Banco Alcalá. Allí estuvieron los organizadores: Antonio y Pablo Jordán, Fernando Valle, Joan Ibáñez, Salva Andrés, Josep Viosques, David Canto y Lourdes Vaño. Entre los invitados, el abogado Javier Ortiz, Carlos Martínez-Colomer, Daniel Bermejo, José Manuel Puig, Vicente Perona, Lucía Asensio, Rocío Andrés, Rafael Tort, el artista Lu Gorritz con su hija Elisa Saez, David Escolá y del Banco Alcalá José María del Rivero y Sergio Montesinos.
Otro de los balcones que más invitados atrae es el de Argimiro Aguilar. Este año ha tenido un invitado estrella: Felipe Juan Froilán de todos los Santos que estuvo con su amiga Alba Díaz Martín, la hija del Cordobés y de Vicky Martín Berrocal. “Los trajeron al balcón mis amigos Helenio Juanes y Carmen Agustín, porque su hijo estudia en la misma universidad y son muy amigos”.

lunes, 12 de marzo de 2018

El glamour es femenino

Si nosotras paramos, se para el mundo”. Y tanto que se para, no hay faceta de la vida que resista ese envite. La vida social sería la peor parada. Qué es un cóctel, una inauguración, o una fiesta cualquier sin nosotras. ¿Os lo imagináis? Todos ellos, ahí, vestidos más o menos igual, sin que nadie opine de lo que lleva el otro, sin que nadie ponga a escurrir al del corrillo del al lado por el color de sus calcetines. Los primeros quince minutos aún tira que te vas, pero cuando ya han contado sus cuatro chistes verdes y hecho un par de comentarios soeces, no les queda otra que hablar de fútbol y de trabajo. Luego pueden pasar dos cosas, o se ponen piripis, y empiezan a cantar y a darse muestras absurdas de amor fraterno, o se sientan en una silla con cara de “aquí estamos, y ahora qué”.
Esta semana la vida social valenciana ha sido aún más femenina que de costumbre.
El martes, Fuvane celebraba su tradicional comida para mujeres en el Ateneo con cerca de trescientas asistentes, entre ellas Hortensia Herrero, la galerista Sara Joudí y su hermana Ana, Mariángeles Fayos, Carmen de Rosa, Amparo Lacomba, Mayrén Beneyto, Marisa Monsonís, Laura y Blanca Fitera, Carmen Pocoví, Sela Falcó, Rosa Criado, Loli Torres, Mayte Montagut, Mari Trujillo, Amparo Genís, Pepa Escriba, María José Navarro, Nidita Guerrero, Mamen Rivas, Sela Falcó, Pilar Pons, Totón Barberá y el grupo de amigas de la junta de apoyo de Fuvane, con María José Albert, Susana Pérez Manglano, Mayayo Gómez Lechón, Begoña Císcar y Santi Aguilar.
Al día siguiente, la ONG Harambee organizaba un encuentro solidario como homenaje a otra mujer de bandera, la nigeriana Ebele Okoye, que ha recibido un premio por promover la igualdad de la mujer africana. Acompañaron a Okey una representación de farmacéuticas valencianas como  Eugenia Olmos, Carmen Aura, Hortensia Forriol, Belén Contel, Amalia y Carolina De Gregorio. También asistieron Carmen Noguera, María Colomina, María Vilabelda, Pilar Garcia Goyeneche, Victoria Vinaixa, Cristina Colomina, Lourdes Martinez Garrido, el directivo del colegio de farmacéuticos, Vicente Brull, el empresario Federico Martínez Weber y su mujer Arancha Aznar, Silvia Raimondo, Henar Molinero, Carmen March y su marido Luis Gamón, Santiago Lisart y su mujer Emilia Reigosa, Javier Morte y Antonio Frigols y Joaquín Fayos.
Del equipo de Harambee Valencia, asistieron Julio Herrero, Elena Colomina, Jesús Acerete, Inmaculada Martinez Caballos, Amparo Ferrando, José Vicente Badimón, Marta Aznar y el empresario de moda Luis Bodes, que viste a los más elegantes de la ciudad.
La semana dio para conferencias y encuentros de todo tipo, con el denominador común de las mujeres. La Fundación Premios Jaime I organizó una conferencia para hablar de la mujer en la ciencia y la empresa. Las ponentes fueron dos de los ganadores de los Premios, Alicia Asín y Eugenio Coronado, la científica Celia Sánchez Ramos, la oncóloga Ana Lluch y la empresaria Hortensia Roig. Moderó la periodista de RNE Pepa Fernández.
En el mercado de Colón, los aficionados a la cerveza pudieron probar cervezas elaboradas por mujeres de Pink Boot Society, una asociación de mujeres cerveceras, ¡cómo mola! Allí estuvieron aficionados a la cerveza, como Guillermo Lagardera, Mónica Navarro, Anthony Pheel, Marivi Vila, Cristóbal Molina, Begoña Navas, Alicia López, Inmaculada Vela,  Noelia Requena, Paco Morrio o Ana Gómez, los empresarios Carlos Muñoz y Carmen Romero; la abogada Paz Sansaloni, las directivas de Ford, Claudia Dupuy de Lome y Sarah Haslam y el artista Lu Gorritz, que expone estos días en la Galería Crearte.
Y el peletero Amado Ortells también dedicó un día a la mujer, su principal clienta. El jueves invitó a su taller a un grupo de mujeres y entregó un galardón a la mujer del año “por sus logros como madre trabajadora incansable, motor impulsor de nuestras vidas y fuente constante de amor”. Mayrén Beneyto ejerció de presentadora y entregó el premio a Elia María González. Entre las asistentes, Amparo Lacomba, Mayte Montagut, Concha Terrasa, Elia María González, Pilar Pastor, Laura y Blanca Fitera, Amelia Delhome, Mercedes Deveha, Lucía Aparicio, María Gimeno, Ester Juan, Natalia Martínez, Merche Fillol, María José García, Teresa Ballester y Maite Rodriguez. Amado ejerció de anfitrión junto a su pareja Esteban Rodríguez.

lunes, 5 de marzo de 2018

Valencia despierta

Una mascletá es mucho más que una sucesión de petardos. Es un evento social, una seña de identidad valenciana, un arte en la creación de armonía con sonidos tan poco musicales como los de una explosión. Una agitación al unísono del oído, la vista y el olfato. Es el despertar del letargo invernal. Y Valencia, cuando escucha los primeros petardos, se crece como cuando entra en nuestro despacho ese becario monísimo de la muerte y tú te recompones en tu silla, levantas el cuello, hinchas el escote y sonríes mientras piensas: anda guapa, despierta que no te vean así con cara de recién levantada.
Esta semana han sonado las primeras mascletaes y la ciudad, pese al frío y la lluvia, ha empezado a prepararse para la primavera. Así es que, chicas, ya está bien de sofá y mantita, a la calle, todas a la calle: sacad las minifaldas de los cajones, bajad de los altillos los zapatos de tacón y rescatad del destierro los vestidos escotados. Demos rienda suelta a los sentidos más concupiscentes: un vinito que anime el cuerpo, una terracita que broncee nuestro escote y unas gafas de sol que nos permitan observar clandestinamente.
Durante estos días ya se ha notado ese revulsivo fallero. La primera cita fue gastronómica. Fotur, la federación valenciana de ocio, turismo y juego, celebraba su gala anual en el CdT de Valencia. Los que entienden de esto, saben que es una noche en la que te dan de comer y beber como si no hubiera un mañana, cosa que no sucede en todos los saraos. Hubo muchos premiados, entre ellos el cirujano Pedro Cavadas, el pirotécnico Ricardo Caballer, el campeón de coctelería Toni Cortés, el Festival de Les Arts, Marina Beach, varios clubs, bingos, DJ’s, la Demostració Gastronómica de la Carxofa de Benicarló, y la periodista Lydia Lozano, que recibía uno de los premios en representación del programa “Sálvame”. No me digan que no son memorables unos galardones que premian a la vez a la Carxofa de Benicarló y a Lydia Lozano. 
Otro fenómeno televisivo se pasó estos días por Valencia: Karlos Arguiñano, que presentó en el Hotel Las Arenas sus vinos de la D.O. Taxakoli. Allí estuvo lo más granado de la restauración valenciana, invitada por Javier Monedero. Ni que decir tiene que también se comió y bebió en abundancia.
La gastronomía también fue protagonista en el Mercado de Colón, esta vez con un toque de diseño. Esta semana se entregaron los premios del concurso de etiquetas de cerveza. Los ganadores fueron Guillermo Rojas, Manuel Ruiz, Miguel Martínez, Diego Lorente, Camila Amezquita, Elena Borrás, Susana Fuentes, Ane González, Carmen Saralegui, Jose Munsuri, Lucía Mascarell y Laura Esplugues. Les acompañaron miembros del jurado como Christian Jardel, Carmina Ibáñez, Isabel Rincón de Arellano, Modesto Granados y Begoña Jordá.
Y el jueves más diseño. El Colegio de diseñadores deinterior y el de publicistas inauguraron su nueva sede en la Gran Vía Germanías.Faltó espacio para tanta gente que acudió a celebrarlo, profesionales y amigos de ambos colegios. Por parte de los publicistas: Carlos Muñoz, Ferrán Salas (Presidente del Colegio), María García, Miguel Lucas, Javier Burgos, Piluca Olmos, María López-Trigo, Miguel Llopis, José Luís Folgado Admunsen, Pepe Martínez, Sandra Femenía, (Vicedecana de Publicidad y RRPP del CEU), Rocío Blay (Vicedecana de la Universidad Jaume I), Vanessa Roger, de ESIC y Rosario Solá. También estuvo Alberto Gozálvez, José Torres Leal, Mariano García, Simon Stpney, Helena Ortíz, Eva Llorens, Ricardo Alcaide y Lola Giner.
Por parte del Colegio de Diseñadores de Interior, estuvo su decano Pepe Cosín, su antecesor Miguel Sánchez, Carmen Baselga, Toni Salinas, Arturo Catalá, Paco Sanchis, Sigfido Serra y Mateo Climent, Paqui Casans, Vicente Montañana y David Carrasco.
La nutricionista Elisa Escorihuela, que acababa de llegar de Madrid de participar en uno de los programas de Saber Vivir, también se acercó al cóctel. Contó que la última moda en dietas saludables es ser flexivégano. Y eso, ¿qué significa? Pues que te declaras vegetariano hasta que una noche te apetece un buen entrecote y te lo zampas sin ningún tipo de remordimiento, ¡me encanta!
El mismo jueves, el pintor Lu Gorrizt, nombre artístico de Luís Sáez, inauguró su exposición “Imperfección, libertad” en la galería Crearte. "Romper verdades que nadie cuestiona es el alimento de las mentes inquietas", dice el autor, que intenta a través de su obra crear nuevas realidades imperfectas, pero enriquecedoras". A la inauguración fueron el registrador Vicente Domínguez, los doctores Teresa Durendez, Luis Ibáñez y Manuel Yarza, Rafa Selma y Elena Diranzo, el abogado Jose Carlos Mora, Pablo Paya, los hermanos Pablo y Antonio Jordá, Ana Melgar, Carmen Martinez, los industriales Rafael Amutio, Vicente Escobar y Felipe Garcia, el pintor Luis Pascual, la escultora Maribel Garcia, la marchante Chiruca y el galerista Jose Luis Navarro, de Crearte, donde se podrá ver al exposición hasta el 15 de Marzo. También estuvieron los hijos de Luis: Elisa, Mar y Luis Sáez, la escritora Marta Querol, María Ortiz, Isabel Mármol, Amparo Domingo, Lola Ruiz y David Cantó, Teresa Rodríguez, Eva Hernández, Javier Domínguez, Alberto la Hoz, Miguel Escalante, Lester Guillermo y Dami Boyero.
La semana también dio hasta para un mini concierto dedicado a los Beatles, anticipo del homenaje que están preparando los músicos de La Movida Valenciana, entre ellos Sergio Aguado (Inhumanos) junto a Mauro Guillén (Generación bibliocafé), Maite Bacete (conservatorio de danza), José Luís Macías (Glamour y Comité Cisne), Adolfo Barberá (Glamour), Puchi Balanzá (Vídeo), Eddy Suay y Pepe Esteban.