martes, 27 de octubre de 2020

Más allá del toque de queda

Con la que está cayendo, lo que queremos es que el 2020 se acabe cuanto antes, por eso ya hay gente protestando, medio en broma medio en serio, porque hoy nos hayan alargado una hora el día. Claro que bien pensado el cambio horario este año tiene sus ventajas. A las siete de la tarde ya es de noche, y ale un pipí y a la cama todo el mundo. Si no podemos salir, mejor que ahí fuera no luzca el sol. Te acurrucas con tu manta en el sofá y a ver una película tras otra. Tu único conflicto es cuando tu Pepe se empeña en poner una de John Wayne o Silvester Stallone y tú prefieres algo del tipo Desayuno con Diamantes o Historias de Filadelfia. Menos mal que los niños ya no entran en estas disputas, aquello de toda la familia junta viendo Raíces o Yo Claudio, ha quedado muy atrás. Ahora ellos desparecen con sus tablets y alguna vez, de cuando en cuando, les oyes reír y crees que quizás estén viendo alguna película de Spencer Tracy y Jack Lemmon. Pero no, están viendo un video chorra de tick tock o a un youtuber haciendo el lerdo. Así son las cosas. La vida social está en horas bajas y le faltaba el toque de queda; ¡uff, que feo suena eso! Así es que a las doce, como la Cenicienta; todos en casa.

Pero hay mundo más allá de la noche. Y como decían nuestras abuelas, cuando nos obligaban a volver a casa a las 10; “no hay nada bueno que no puedas hacer por el día”. Por ejemplo, Laura Fitera, de una vitalidad arrolladora, organizó esta semana una cena en honor a su amigo el decorador Isaac Estevez con el pintor Enrique Senis, David Phillips, Mayrén Beneyto, Manuel Picazo y Emilio Moreno. Para el centro de mesa, encargó calabazas minis, que mezcló con flores, granadas, manzanas rojas y hojas secas. “Quería hacer una decoración otoñal, pero el curry de la cena me llevó a una decoración hindú-chic”.


Otra mujer de bandera, Cuchita Lluch, se reunió con todos sus hermanos, hijos y sobrinos en Náquera, donde su madre tiene una casa de verano tan grande como su familia; José Cosme compartió mesa en una terraza de la Alameda con su madre Presen Rodríguez y Ximo Ros y Montse Salamanca volvieron a brindar con champán en el ático del Casino de Agricultura.


La pizpireta Paula Alcón, hija del presidente de la Fundación Bancaja Rafa Alcón, está ya  preparando la próxima edición del Cool Market de Navidad, ojalá que para entonces la situación haya mejorado. Por lo pronto, Paula celebró el cumpleaños de Bea Sánchez en Denia con sus amigas Claudia Bonet, Ana Prieto, María Raga y Elena Blasco.

Y el sastre Antonio Puebla, que pasa los fines de semana en Altea en el Hotel Villa Gadea, quedó a comer en la terraza del chiringuito La Olleta con su amigo Pepe Barranqui, el empresario José Luis Vilanova, la interiorista Verónica Montijano y el periodista Fernando Ferrando. La verdad es que el sitio, con vistas a un mar plano como un plato y a la Serra Gelada, tiene un toque paradisíaco que poco o nada tiene que envidiar al mismísimo Caribe.

La semana ha tenido un par de inauguraciones de arte de lo más interesantes. La más importante en las Atarazadas, donde se exponen las obras de la Bienal Mª Angeles Comenge, con artistas como Alex Marco (ganador del certamen), Toño Barreiro (segundo premio), Nico Munuera, Carolina Ferrer, Volkan Diyaroglu (accésits), Helga Grollo, Nanda Botella, Rebeca Plana, Ana Chacón, Mery Sales o Inma Femenía, entre otros.

La segunda fue la de Lourdes Paterna, diseñadora de moda infantil que ha decidido explorar su vena artística y el jueves inauguró exposición. Al cóctel fueron los fotógrafos Frank Murray y Mario Agulló, los arquitectos Pablo Escario y Javier González, el empresario Martín Redón, la directora del Caxton Amparo Gil, Regina García, Carla Gutiérrez, Sara Monterde, los periodistas Ginés Llorca y Cruz Guillot y Nacho Sanchís.

También estuvo la diseñadora Hortensia Maeso, que no se perdió el Festival de Cine Antonio Ferrandis de Paterna que premió al actor Javier Gutiérrez. Carolina Ferré presentó la gala, a la que fueron Luis Esteban, Asun Oliver, Ramón Silla, la periodista Natalia Segrelles, Javier Romero, Nuria Cidoncha y el cineasta Miguel Ángel Font.

martes, 20 de octubre de 2020

Reencuentros

Las redes sociales se han cargado buena parte de la magia de los recuerdos, sobre todo los de la adolescencia. Antes de que existieran, retenías en tu memoria imágenes difusas del chico que te gustaba. Lo recordabas tan rubito, llegando al cole con su vespa rosa con una pegatina de Snoopy. ¡Ay, qué mono era! Su recuerdo era una imagen idealizada y edulcorada. Pero hete aquí que irrumpen las redes sociales y un buen día te acuerdas del rubito y tecleas su nombre en el ordenador, encuentras su perfil, corres emocionada a abrir su carpeta de fotos y…!ay, no puede ser! el rubito de cara angelical es ahora un señor gordo y con poco pelo que te recuerda más a tu padre que a tu príncipe azul. Y lo peor es que si entablas conversación con él descubres que no tenéis nada de lo que hablar, más allá de las cuatro anécdotas del colegio. Al final te preguntas que quién te mandaría a ti buscar su perfil, con lo bien que se hubiera quedado en el cajón de los recuerdos.

A pesar de todo, las redes sociales han ayudado a mucha gente a reencontrarse. Es lo que le sucedió a Marc Albert Fourfooz y Leo López Camps, que llevaban años sin verse y se volvieron a ver hace unas semanas gracias a internet. “Marc y yo éramos muy amigos de jovencitos, él era novio de mi hermana Lola y le queríamos como a uno más de la familia. Esa relación se rompió y nos distanciamos, hacía 26 años que no nos veíamos, entre otras cosas porque vivía en Amberes. Volvió a Valencia hace unos meses y le pidió a una pareja de amigos, Mariló Dionisio y Dani Soler, que le ayudasen a localizarnos. Como no tiene Facebook, fue Mariló la que me escribió contándomelo; nos citamos en el restaurante que tiene la pareja en Pinedo, la Creu de la  Conca. Mi hermana no pudo venir porque estaba enferma, pero fue un reencuentro súper bonito y quedamos en volvernos a ver con nuestros maridos”.


Con la vida social tan bajo mínimos, los reencuentros se producen incluso con amigos que antes veías a menudo y ahora ves con cuentagotas. Es lo que pasó el jueves en la terraza del Westin. La actuación de Javier Botella reunió a un grupo de amigos del cantante, entre ellos Carlos Oliden, Laura Vernetta, Monica Patricia Jareño, Arturo Hernante, Montse Climent Mir Ruben Lozano Rodriguez. También fue el joyero Vicente Gracia, que está participando estos días en ShineOn, una venta solidaria de joyas a beneficio de Unicef junto con las joyeras Hannah Carnegie, Gogo Ferguson y Hannah Martín. Por cierto, que el 21 de octubre se celebra el día contra el cáncer de mama y El corte inglés está iluminando de color rosa las fachadas de sus centros comerciales. En Madrid fue Eugenia Osborne la encargada de encender la fachada.

Por lo demás, la semana ha sido bastante tranquila. Vicen Fernández celebró el cumpleaños de su pareja Manel Soler en el restaurante de Ricard Camarena y Mayrén Beneyto el de su marido Ramón Almazán en familia. “Lo celebramos en casa, con todos los niños y la pequeña Irene, que le adora”, cuenta Mayrén.

Mientras, la vida cultural sigue dando algo de vidilla. El Casino de Agricultura reanudó sus clases de cultura con una conferencia del profesor Ballester Olmos y el Ateneo presentó el nuevo libro de José Antonio Olmedo, además de firmar un convenio con el Club de Golf Foresos. El jueves la artista Charo Marín inauguró exposición en el Palacio de Colomina. Estuvo acompañada por Vicente Navarro de Luján, Coté Soler, María Rosa Fenollar, Carmen Fons, Inma Aznar, Esmeralda Marugan y Omar Ortiz.

martes, 13 de octubre de 2020

Cumpleaños en familia


Los cumples ya no se celebran a tutiplén. Tiene su parte buena. Las fiestas se habían desmadrado tanto, que muchas incluían photocall, dresscode y hasta decoraciones temáticas. Vamos que te invitaban a una y tenías que prepararte un mes antes para la ocasión como si fueran bodas. ¡Madre mía, tirábamos con pólvora de rey! Ahora todo ha vuelto a su cauce y los cumples son más austeros. Julia Pérez Broseta celebró esta semana el suyo con unos pocos amigos: la interiorista Verónica Montijano, el sastre Antonio Puebla, el arquitecto Carlos Salazar y los diseñadores Mateo Climent y Sigfrido Serra. Recibió unas velas de regalo, pero no eran cualquier vela, no; el aroma de cada una había sido seleccionado ex profeso para la personalidad de Julia: Una vela olía a Ola de mar, “por tu cercanía al mediterráneo, tus viajes a Ibiza, Altea y Xàbia; el segundo olía a bruma, “en recuerdo de un viaje a Escocia”; y el tercero olía a calma, “como tus masajes y lo mucho que te cuidas para lucir tan estupenda”. ¡No sé qué me da más envidia si las dedicatorias o lo bien que se lo pasa Julia, que no para quieta!


Se celebraron más cumples. La galerista Olga Adelantado celebró sus cincuenta con sus amigas Cuchita Lluch, María José Calabuig, Sara López y Teresa Badía. Fueron al restaurante la Escaleta, de Kilo Moyá y disfrutaron como buenas aficionadas a la gastronomía. También celebró cumple la madre de Ximo Ros, unos 71 muy bien llevados que compartió con su marido Joaquín Ros y algunos amigos íntimos.


María José García Padilla, la mujer del empresario Enrique Duart, no cumplía años pero quiso invitar a sus amigas Mayrén Beneyto, Laura Fitera y Amparo Lacomba a su casa de Benifaió. Comieron en la terraza y disfrutaron de esa conversación cómplice que se da entre mujeres que se aprecian.

La semana también dio para varias citas culturales. El Club Moddos no quiso perderse la exposición de Antonio López en la Fundación Bancaja y a la cita acudieron Maria Dolores Enguix,  Marcelo Soto, María Dolores Pérez Lis, José Vicente Tello, Lluis Nadal, Julia Pérez Broseta, Esperanza Cuadrado, Santiago Castell y Gonzalo Gómez-Luzón.


Y en el Ateneo, Carmen de Rosa participó en la presentación del libro "Ñ, manual de autoestima para españoles", en el que ha colaborado con capítulo sobre la mujer en el mundo laboral junto al cocinero Quique Dacosta, Luis María Ansón, Santi Cañizares o David Casinos. Los beneficios del libro serán para Cruz Roja Española.


¡Más libros y eso que no es la semana del libro! Ángel de la Vara, vinatero y escritor, presentó una edición especial de su libro de poemas “Como estatuas rotas” en el que regalaba una botella de mistela y una foto. ¡Qué buena idea! La cita fue en un restaurante italiano. Los invitados bebieron vino y escucharon poemas, dos actividades que maridan bastante bien. El poeta estuvo acompañado por Carmen Torres, Salvador Silvestre, Javier Yabeta, Vicenta Martín, José Luis Arnau Rafa Moreno y José Alandés, María Villaplana, Juan Carlos López, la ex catedrática Carmen Torres Ferrer, Jose Luis Arnau, Carlos Gracia, Isabel Alabau, María Arlandis, Juan Carlos López, Javier Núñez y la familia del poeta. Ángel Vara confesó que “Me estoy dedicando a lo que verdaderamente me gusta en la vida y no a lo que me marca el reloj biológico. Gracias a que tengo todo cubierto y he hecho todo lo que tocaba, trabajar, casarme, tener hijos … ahora puedo sentarme a escribir poesía”. ¡Jolines que afortunado!

El periodista valenciano y director del Festival de Cine Antonio Ferrandis de Paterna, Pau Gómez, también presentó hace unos días un libro sobre Martin Scorsese. Estuvo acompañado por María Abad, Mamen Monsoriu, Ángela Macor, Amadeu Sanchís, Elena Ruíz, Carmen Torrecillas,  la ceramista Mónica Mon, Vicente Llorca, Cristina Ordozgoiti  y Eva Montesinos.

miércoles, 7 de octubre de 2020

Limonada para todas


Hay una frase de esas motivadoras que repiten machaconamente los libros de autoayuda y las tazas con mensaje y que dice así: “si la vida te da limones, haz limonada”. La moraleja está clarísima: si no puedes cambiar las circunstancias adversas, adáptate a ellas. ¿Que se pone a llover el día que estrenabas tus tacones de Prada? Pues cálzate botas de agua y da gracias por poder ir cómoda. ¿Que tu Pepe se pone a ver el fútbol justo cuando querías ver tu serie favorita? Coges un libro y te culturizas un poco. ¿Se te ha quemado la comida en el horno porque estabas jugando con el móvil a los marcianitos? Compras comida preparada y aquí paz y allá gloria.


Claro que hay situaciones que son más duras de sobrellevar. Por ejemplo, que hayas tenido que cancelar o posponer tu boda por el dichoso coronavirus. Eso sí es un pequeño drama (hay otros mucho peores, claro). No quiero ni imaginar lo que han sufrido las pobres novias que han pasado por ese trance. De los novios no hablamos porque a ellos les suele dar igual tres que treintaitrés, se ponen el chaqué, y listos. Pero nosotras, ufff, el vestido preparado, la prueba de maquillaje y peinado, la decoración floral acorde con la estación del año, las invitaciones enviadas, tantos meses preparando el gran día y todo tirado por la borda. Yo hubiese estado una semana llorando. Menos mal que las chicas somos fuertes y, como dice la frase motivadora, si tienes limones, a hacer limonada. Si además le añades un poco de ginebra y la sirves en una copa de balón, ya no te cuento lo buena que queda.

Pasado el shock inicial, muchas parejas han decidido casarse adaptándose a las circunstancias. María Más y Miguel Sanchís son una de ellas. Tenían fecha de boda en mayo, la tuvieron que cancelar y la celebraron hace unos días, con menos invitados y un montón de medidas de seguridad. El convite fue en una masía al aire libre, decorada con flores de Conchita Cañamás. Las mesas del jardín estaban muy separadas y no hubo barra de bebidas, si querías tomar algo los camareros estaban pendientes en todo momento. La madre del novio, Concha Pérez, y su hija Carla Sanchís, así como la madre de la novia, Isabel Ferrando, vistieron de Enrique Lodares. Enrique tiene un don especial para los vestidos de ceremonia, les da un punto de glamour que recuerda a las estrellas del Hollywood dorado. La novia llevó un vestido de Rosas Rosa y los chicos vistieron de chaqué. ¡Qué elegantes las amigas de la madre! Pilar Pons, María José Albert, Isabel Gómez Ferrer, Amparo Moreno, Amparo Bonet, Ana Verdecho, Pilar Medrano y Marga Gómez-Ferrer, pusieron una nota de color de lo más alegre.


Al aire libre también comieron los socios de Cuchara de Plata, que eligieron para su cita mensual la terraza del Gordo y el Flaco en Bétera. ¡Qué bien se lo montan! Estuvieron Vicente García, José Vicente Tello, los hermanos Toni y Pablo Jordán, Manuel Peris, Javier Vela, Sergio Terol, José Vicente Morata y Javier Monedero. Faltó el sastre Antonio Puebla, que pasa los fines de semana en Altea apurando los últimos días de playa y quedando a comer con amigas estupendas, como Verónica Montijano y Julia Pérez Broseta.

Las galerías de arte y sus artistas también han animado la semana. Abierto Valencia, la celebración de las galerías, ha sido la excusa perfecta para arreglarse y salir monísimas de la muerte a las inauguraciones.