El nombre de Hannah Sayre-Thomas puede que no os suene familiar,
pero si os digo que pertenece a la saga de los Carnegie, una de las fortunas
más antiguas de EEUU emparentada con los Rockefeller, que su infancia
transcurrió en una isla privada llamada Cumberland, que su familia sufragó la
campaña política de los Kennedy y que su madre es la Gogo Ferguson, cuyas joyas
han lucido Hilary Clinton y Laura Bush, la cosa se empieza a poner interesante.
Bueno pues Hannah ha heredado de su madre la pasión por las joyas y de todos
los lugares del mundo mundial donde podría vivir ha elegido Valencia.
El martes estuvo en la joyería de Vicente Gracia en el
cóctel de Navidad. Sus joyas, con figuras de insectos y pequeños animales,
compartían vitrina con las de Vicente y con antigüedades de la coleccionista
Deborah Elvira. En casa de Vicente Gracia todo es así de internacional, exótico
y glamuroso. Entre los invitados, estaba el buscador de ópalos Attila Pereghy,
el director de ópera Alexander Herold, deslumbrado por el lujo y la elegancia
que se respiraba en la joyería: “Acabo de llegar de París y allí ahora todo es
grunge y hípster”, dijo.
Vicente estuvo acompañado por sus hijos y su mujer
Mónica Jareño y muchos amigos y clientes:, Javier Martínez Rubio, Coté Soler, Sergio
Carrión y Guillermina Cattaneo, Elena Girona, que llevaba un collar de Gracia
tipo babero súper chulo, su hija Rocío Bordills, la artista Marusela Granell,
el estilista Alex Jordán, la doctora Lucía Asensio, el artista Paco Seoane,
Amparo Lacomba, la empresaria María José Solaz, Carmina García, Amparo Tarazona, Jesús Cutanda y su mujer
Esperanza Serra, Carmen de Miguel, Begoña Ortiz, el artista Lu Gorritz, el
músico David Phillips, Pilar Millán y María Rosa Fenollar, que el jueves
organizó un desfile benéfico en el Ateneo.
Vicente es tan buen anfitrión que
consigue que gente de edades y entornos muy diferentes se entiendan de maravilla
y lo mejor, que haya buen ambiente y risas contagiosas, que falta hacen con
tanto cenizo suelto. El cóctel fue vegetariano, la música en directo la puso
Javier Botella y la bebida, como no podía ser de otra forma, fue champán.
Estos días se suceden las copas de Navidad. El Casino de
Agricultura aprovechó el torneo de canasta para organizar una comida a beneficio
de una asociación benéfica; los diseñadores brindaron en el Mercado de Colón
por la capitalidad del diseño; y Paula Alcón, Menchu Moreno, Inma Segarra y
Mónica Fierro organizaron una jornada familiar en Palau Alameda a beneficio de
varias ONG’s con talleres, animación y desfiles de ropa infantil, entre ellos
la colección de ceremonia de Jose Vivó. Hasta allí se acercó el presidente de
la Fundación Bancaja Rafa Alcón, María Noguera, Irene Guasque, Nacho y Tote
Serratosa, Emilio Bayarri, Pablo Furió, Rocío Sirera y Cristina Vañó.
La hija de Laura Fitera también organizó un almuerzo
navideño con amigas.
Y los hermanos Jordán, Pablo y Toni, hicieron lo propio
pero en la tienda de su amigo Fernando Valle en Poeta Querol, decorada por
Sigfrido Serra y Mateo Climent, la pareja de moda en diseño. Compartieron mesa
con la nutricionista Elisa Escorihuela, Pablo Jordán, Ana García-Conde, Antonio
Jordán, Beatriz Maset, Patty Serrano, Vicente Andreu, Elisa Escorihuela, Juan
Lagardera, Ángela Plá, Jose Luis Lanuza, la doctora Lucía Asensio y Nuel Puig.