Tenemos que cuidar la estética navideña. Por ejemplo, hay
tres cosas que nunca debe ponerse un hombre cuando va a un cóctel o a un
cenorrio navideño: los vaqueros, los calcetines blancos y las botas tipo cowboy
o motero, Luis Bodes, gerente de Hannover dixit. Así es que, si en Nochebuena
tu chico, en un alarde de originalidad o rebeldía, se calza una botas para ir a
cenar a casa de su madre, tienes que plantarte en la puerta y decirle; “Mira
guapo, con esas pintas no sales de casa conmigo y menos para cenar en casa
de Mamá, con tus hermanas danzando por
allí. Que no me he pasado yo la tarde pensando cómo vestir a los niños para que
ahora vengas tú y lo eches todo por tierra con esas botas camperas que llevabas
cuando frecuentabas Cánovas en los años de gloria de Alaska y los Pegamoides”.
La Navidad hay que cuidarla ahora más que nunca, porque ya
nos han quitado las cestas, los jamones incluso los Christmas en papel, ahora
son todos digitales y no es lo mismo, porque los de papel te hacían sentir una
de las elegidas, además iban llegando poco a poco y te servían para decorar la
mesa del despacho. Ahora, llegan todas juntas, sabes que tú eres solo una más en
la lista de “contactos” y al final ni las abres, directamente le das a
suprimir.
Afortunadamente, todavía hay quien mantiene las tradiciones,
como Loewe, que ha enviado un tarjetón
precioso que parece un lienzo, con su marco y todo, y una dedicatoria escrita
de puño y letra por Amparo de la
Concepción, la directora de la tienda en Valencia.
El joyero Vicente
Gracia también es un gran amante de las tradiciones y celebró su cóctel de
Navidad el jueves pasado. Las fiestas de Vicente Gracia siempre son las más
divertidas porque reúne a gente de lo más interesante, “gente que no es la de tota la vida, gente que está en
circuitos diferentes, que no se conocen entre sí y a la que me encanta
mezclar”. Allí estuvo el arquitecto Ramón Esteve, Carmen Magraner, Adela, una
señora que a sus ochenta años todavía baila flamenco y que vivió toda la época
de Tánger en los años 50 porque su padre tenía allí la distribución de Bodegas
Hispano Suizas, la actriz María Luisa Merlo, Agustín Morera, Pepa Martí y la
diseñadora Marta de Diego, Luís Font de Mora y su mujer Charo, que fue
secretaria de Chencho Arias en su época de embajador de EEUU…
Entrar en la joyería de Gracia es hacerlo como en la cueva
de Alí Babá, con tesoros escondidos, antigüedades, lienzos y piedras preciosas.
Durante estos días, se puede ver la exposición de ópalos de de Attila Pereghy,
un aventurero que recorre África y Australia a la caza de estas piezas. Además
de la última colección de Gracia, una serie muy divertida de piezas tutifruti inspiradas
en el fruto de la granada, con piedras granate y hojas de color verde. Las
joyas de Gracia tienen un aspecto simbólico y casi mágico junto con un
toque fallero muy valenciano.
La semana que viene, más citas postnavideñas. El jueves 27 se
inaugura Cosmetics Boix, un espacio de dermocosmética de la Farmacia Boix en
Pascual y Genís. Y el 25 se celebra la gala de los Premios de la Academia
Valenciana de Gastronomía en el restaurante La Embajada.
Y hablando de restaurantes, acaba de abrir La Terraza delPatriarca en uno de los sitios más chic de Valencia, la plaza del Patriarca.
Allí, cerca de Hermès y Vuitton, puedes sentirte como en un café parisino, sólo
que en vez de tomar omelette, te pides unas bravas, un bullit valenciano o unas
croquetas de morcilla. También dan desayunos y cócteles. Los dueños han cuidado
todos los detalles: uniformes diseñados por Fran Tochena y la carta ilustrada
por el dibujante Paco Roca. Vamos, el sitio ideal para quedar con un par de
amigas y relajar el estrés de las comilonas familiares.
(foto: CUELLAR)
1 comentario:
Yo llevo camperas en nochebuena y soy muy feliz, y tengo amigos que visten extremadamante bien que usan calcetines blancos con zapatos de rejilla o creepers, no crees que está un poco anticuada ?
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